martes, 29 de septiembre de 2009

¡Cuidá las palabras!

Ante el recrudecimiento del conflicto agropecuario, el gobierno habría ordenado a su tropa suprimir la palabra 'paja' cuando quieran hacer referencia a un quehacer fastidioso o molesto, sugiriéndoles utilizar el término 'fiaquita' para ese menester.

Así también se quitaron del diccionario oficial del habla frases poco célebres para la ocasión como 'criar cebo', popularmente utilizada para referirse a los momentos donde no se tiene nada para hacer.
La misma suerte corrieron 'más tira un pelo de concha que una yunta de buelles', 'tenemos todos que cinchar para el mismo lado' o 'cortito como patada de chancho'.
En lo culinario, se terminaron las milanesas a caballo en los almuerzos oficiales.
Un hecho curioso es lo que ocurrió con 'es un leche hervida' y 'mala leche', ya que a la víspera de una reconciliación con los tamberos, muchos funcionarios están ansiosos de poder volver a usarlas.